Crecen más de un 1000% los casos de ITS en mujeres en los últimos 7 años en España
- Entre las infecciones de transmisión sexual más diagnosticadas, destaca la clamidia (64,8% de los casos), gonorrea (15,6%) y el virus del VIH (8%). Además, el 80% del total de los casos diagnosticados fue en mujeres de entre 15 a 35 años.
- En España se registraron más de 16.000 mujeres con alguna Infección de Transmisión Sexual (ITS) en 2019 [1], una cifra que se prevé que siga creciendo.
- Estos datos se extraen del Observatorio Bloom: ITS en mujeres en España, un estudio impulsado por la plataforma de salud femenina integral Bloom, que destaca un cambio de hábitos sexuales, con relaciones más tempranas y relajación en el uso de preservativos y que cuenta con el apoyo de Dexeus Mujer y Fundació Puigvert.
Madrid, 8 de junio de 2022. El Observatorio de Salud Femenina impulsado por Bloom, la plataforma digital de salud femenina integral, y con el apoyo de Dexeus Mujer y Fundació Puigvert, presenta por primera vez una importante investigación de datos centrados en mujeres y ofrece una visión global sobre el aumento del número de casos de ITS en mujeres diagnosticados, con el objetivo de concienciar y visibilizar un problema de salud que no solo afecta a grupos de población concretos.
Según el informe, la evolución de las ITS en mujeres en España ha ido creciendo hasta llegar a su punto máximo de contagios en 2019 cuando se registraron al menos 16.304 casos, suponiendo un incremento del 1.073% respecto a 2012. En este sentido, la tasa de incidencia (porcentaje de casos por cada 100.000 habitantes) para el año 2019 alcanzó el 67%.
Entre 2012 y 2019, en España se diagnosticaron 50.052 nuevos casos de ITS y Enfermedades de Declaración Obligatoria (EDO) en mujeres, según los datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE) y de los sistemas de vigilancia epidemiológica de las comunidades autónomas. Si nos fijamos en porcentajes por tipo de infección o enfermedad, el 64,8% de los casos diagnosticados corresponden a clamidia, mientras que un 15,6% de los casos diagnosticados fueron de gonorrea, seguido de VIH (8%), sífilis (5,6%), hepatitis C (3,6%), hepatitis B (2,3%) y linfogranuloma venéreo (0,1%).
Aunque el diagnóstico de casi todas las ITS EDO ha crecido en los últimos años, no todas lo han hecho de la misma manera. La infección gonocócica (gonorrea) ha sido la que más ha crecido desde el año 2015: un 729%. En cambio, la clamidia (chlamydia trachomatis) fue la ITS que registró un mayor número de casos durante todo el periodo, incrementándose un 480% entre 2015 y 2019. Por su parte, los casos de sífilis, linfogranuloma venéreo y hepatitis C en mujeres crecieron un 129%, 178% y un 76%, respectivamente.
“En los últimos años han aumentado las prácticas de riesgo, ha crecido el número de parejas y han surgido algunas aplicaciones para poner en contacto personas que quieren mantener relaciones. Esto sumado a la mejora en las pruebas diagnósticas y los movimientos de la población -se viaja más y se infecta más que hace unas décadas- podría explicar el crecimiento de las ITS en España”, ha señalado el Dr. Alvaro Vives, andrólogo y Jefe de la Unidad de Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) de la Fundació Puigvert.
En el mismo sentido, Laura Cámara, enfermera especialista en ginecología y obstetricia, sexóloga y colaboradora de Bloom, ha añadido que existen cambios no solo en el modo en el que las personas se vinculan afectivamente si no también sexualmente: “el número de parejas sexuales que podemos llegar a tener durante nuestra vida ha aumentado y si esto ocurre con menor protección sí entraña un riesgo mayor”.
En cuanto al VIH, cabe destacar un crecimiento del 5,6% de los nuevos diagnósticos, aunque si se amplía la mirada a años anteriores se puede apreciar un descenso considerable de los casos, que en realidad llevan una década estancados entre los 400 y 500 nuevos diagnósticos por año en el caso de las mujeres. Por último, la hepatitis B ha sido la única infección que ha remitido entre 2015 y 2019, reduciéndose un 41% entre ambos años.
Y en cuanto al VPH, aunque se sitúe fuera de la lista de las ITS EDO, es la ITS más común en toda la población. Cerca de un 80% de las mujeres se infectará por un tipo de VPH a lo largo de su vida, de acuerdo con la Asociación Española de Pediatría (AEP). Además, destaca que la prevalencia del VPH de las mujeres en España es de un 14,3%, según las estimaciones del estudio Cleopatre publicado en 2012, aún vigente. En el caso de las mujeres de entre 18 y 25 años, esta prevalencia aumenta al 28,8%. Sin embargo, a mayor edad, menor prevalencia: si en las mujeres de entre 26 a 45 años la tasa es del 13,4%, en las de entre 46 y 65 años, es del 7,9%.
A menos edad, más casos diagnosticados
Si nos fijamos en el diagnóstico según la edad, los datos muestran que las mujeres más jóvenes tienden a registrar un mayor número de casos en comparación con las mujeres de avanzada edad.
De acuerdo con los datos aportados por el Instituto de Salud Carlos III, en 2019 el 50% de casos diagnosticados correspondían a mujeres de entre 15 y 24 años. Si se amplía la horquilla de edad a los 34 años, estas mujeres acumulan el 80% de los casos diagnosticados durante aquel año.
En el caso de las mujeres mayores de 55 años, la ITS más diagnosticada fue la gonorrea (36%), seguida por la sífilis (34%) y, por último, la clamidia (30%). El informe muestra, además, que a más edad de las mujeres, descienden los casos de clamidia y suben la sífilis y gonorrea.
Según indica la Dra. Alicia Úbeda, jefa del Servicio de Ginecología de Dexeus Mujer “contraer una ITS o una ETS y no tratarla y diagnosticarla a tiempo supone varios riesgos en la salud de la mujer. En primer lugar, puede provocar irregularidades en su patrón de sangrado menstrual y dolores pélvicos. Además, si perjudica el interior del útero o las trompas puede acabar produciendo esterilidad o abortos”. Por este motivo, “es importante tomar medidas preventivas y hacerse controles específicos si se han mantenido relaciones de riesgo”, añade.
La razón por la que las mujeres mayores de 35 años registran menos casos de ITS se debe a la estabilización en el número de parejas sexuales, según confirman los expertos consultados. Sin embargo, cabe destacar que, en el caso del VIH, se ha detectado una mayor transmisibilidad en las mujeres en la segunda mitad de la treintena.
Las ITS, más prevalentes en núcleos urbanos y zonas turísticas
La transmisión de las ITS atiende a un esquema fundamental: allí donde hay mayor concentración de población, existe también un mayor riesgo de contagio. Así lo muestran los datos recogidos entre 2015 y 2019, en el que el aumento de los casos fue sostenido durante todo el período. Algunas de las comunidades más pobladas, como Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana, fueron las que registraron más diagnósticos. De hecho, en 2019, Cataluña concentró más de la mitad de casos de ITS a nivel estatal, el 58% en total.
Con bastante distancia, Madrid se situó en el segundo puesto del ranking, con el 11% de ITS registradas en todo el país en 2019. Una suma de 1.748 nuevos casos. Le siguieron la Comunidad Valenciana (1.375 casos, un 8,7% del total), Andalucía (887 casos y un 5,6% del total) y País Vasco (800 casos, un 5%).
Las ITS no tienen un carácter estacional. No obstante, en el marco de este estudio se ha observado una correlación positiva entre el flujo turístico de una región y los casos de ITS. Esto significa que los territorios que reciben más turistas, tienden a diagnosticar un mayor número de casos de ITS.
Ya estábamos así en los 2000: prácticas sexuales de riesgo y educación sexual deficiente
El Observatorio Bloom de Salud femenina se completa, además, con una encuesta de opinión elaborada por Sondea para conocer las tendencias en salud sexual de las mujeres y personas no binarias en España, así como la percepción de las españolas sobre su educación sexual. La encuesta se ha llevado a cabo en mayo de 2022 con el objetivo de contrarrestar la falta de inclusividad de los datos clínicos.
Entre los resultados destaca que de 9 de cada 10 mujeres y personas de género no binario (94,51%) indica que han usado algún método anticonceptivo, como el preservativo (83,92%) y las pastillas anticonceptivas (57,94%), siendo también los más usados por las mujeres y personas de género no binario encuestadas (49,63% y 22,61% respectivamente). En cuanto al conocimiento, es el condón o preservativo masculino el más conocido (97,97%) seguido del preservativo femenino que lo conocen 3 de cada 4 mujeres y personas de género no binario encuestadas (75,31%).
La encuesta desvela, además, que más del 70% de las encuestadas ha comprado preservativos alguna vez (72,88%), mientras que 1 de cada 3 (34,83%) ha sido presionada para no usar el preservativo y cerca del 30% tiende a relajar el uso del preservativo cuando bebe (29,99%). En la misma línea, el informe muestra también que un 30% ha intercambiado juguetes sexuales con su pareja sin protección y más del 10% declara que se han quitado el preservativo sin su consentimiento (14,40%), que han practicado sexo en grupo (11,13%) o han practicado Chemsex (10,89%).
El 27% de las mujeres y personas de género no binario encuestadas para la elaboración del Observatorio afirma que ha padecido o sospechado padecer alguna Infección de Transmisión Sexual (ITS) o Enfermedad de Transmisión Sexual (ETS). Así, cerca de 6 de cada 10 mujeres y personas de género no binario consideran muy o bastante probable haberla contraído con su pareja habitual (58,76%).
“La vergüenza, el estigma y el tabú han acompañado desde siempre a las ITS. En este sentido, es necesario impulsar campañas de prevención y educación sexual a mujeres y personas de género no binario de todas las edades pero especialmente a las más jóvenes”, ha detallado Vives.
Así, y teniendo en cuenta la percepción de las mujeres y personas de género no binario en España sobre su educación sexual se puede concluir que es todavía deficiente: 7 de cada 10 (70,26%) considera que a lo largo de su vida han tenido una educación sexual regular (41,17%), mala o muy mala (29,09%).
“La educación sexual tiene que ser percibida como una carrera de fondo que empiece antes de llegar a la adolescencia. Hay que crear espacios informativos de calidad para acercarnos a los jóvenes en temas como las relaciones, el placer, el sexo, las Infecciones de Transmisión Sexual o los embarazos no deseados”, ha concluido Laura Cámara.
Metodología
Para el lanzamiento de este Observatorio se ha diseñado una metodología mixta que combina datos y conclusiones cuantitativa con cualitativa, basada en la recolección, clasificación, categorización y análisis de datos de diversas fuentes primarias oficiales y expertas.
Se han analizado y estudiado la incidencia de las Infecciones de Transmisión Sexual reconocidas por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE) conocidas como EDO: chlamydia trachomatis, linfogranuloma venéreo (LGV), sífilis y sífilis congénita, infección gonocócica, VIH/SIDA y la Hepatitis B y C (poco común).
Para la extracción de datos se han analizado las siguientes fuentes de información: los datos de transparencia de las comunidades autónomas que han respondido a solicitudes específicas; los datos de los boletines epidemiológicos; los datos del Instituto de Salud Carlos III.
Los datos incluidos muestran la evolución de las ITs registradas en España desde 2012 y hasta 2019, el último año del que se tienen datos de fuentes oficiales. No existen datos que reflejen la situación en 2020. El Observatorio no sustituye a los datos oficiales, se ha diseñado como un informe epidemiológico, que ayude a la población a tomar mejores decisiones sobre su salud sexual.
[1] Los datos incluidos en el Observatorio Bloom: ITS en mujeres en España muestran la evolución de las ITS registradas en España desde 2012 y hasta 2019, el último año del que se tienen datos de fuentes oficiales. No existen cifras que reflejen la situación en 2020. Es por ello, que para captar la realidad de los hábitos y tendencias en materia de educación sexual, se ha llevado a cabo una encuesta a 2.000 mujeres y personas no binarias en nuestro país.