La testosterona, conocida como “la hormona sexual masculina” no solo tiene funciones en la esfera sexual, sino que además está implicada en muchas otras funciones en el organismo del hombre.

Los síntomas y signos clínicos que experimentan los pacientes dependen de la edad en que aparece el cuadro de hipogonadismo. Desde el retraso o no desarrollo de los caracteres sexuales secundarios en jóvenes prepuberales, hasta osteoporosis, alteraciones del metabolismo, disminución de la masa muscular, aumento de la masa grasa, cambios en el humor, depresión, ansiedad, irritabilidad e insomnio, etc., cuando el hipogonadismo aparece en la edad adulta.