Gonorrea
En qué consiste
Es una infección de transmisión sexual causada por el germen Neisseria gonorrhoea. Afecta principalmente a la uretra (conducto de la orina), al cuello de la matriz, al ano o a la orofaringe. Los síntomas más frecuentes dependiendo de la localización de la infección son: supuración uretral franca, dolor o escozor al orinar, secreción anal y/o dolor al defecar, flujo vaginal anormal o dolor en el bajo vientre. En ocasiones pueden haber infecciones asintomáticas, más frecuentes en la mujer y en función de la localización más frecuentes en la orofaringe y el ano, de forma que la persona no sabe que está infectada y que puede infectar. Como cualquier infección de transmisión sexual puede favorecer la adquisición y la transmisión del VIH (virus de la inmunodeficiencia humana).
Cuáles son las causas
La vía fundamental de transmisión de la gonorrea son las relaciones sexuales sin protección: por contacto directo con las secreciones genitales (Cervico-vaginal, uretra) y también con las secreciones de las mucosas de la orofaringe y ano de la persona infectada. Los hombres pueden coger la infección en la orofaringe a través del sexo oral a otros hombres infectados, aunque no haya eyaculación y no a través del sexo oral a una mujer. También puede haber transmisión de madre a hijo al pasar por el canal del parto. La gonorrea no se puede coger por: abrazarse, besarse o compartir los cubiertos, la comida o la bebida o a través de los sanitarios y los pomos de las puertas.
Cómo se diagnostica
En las personas que presentan síntomas el diagnóstico se hace mediante la toma de una muestra con un hisopo ya sea de la uretra, orofaringe, ano o cerviz y su posterior procesamiento en el laboratorio. En las personas asintomáticas se suele diagnosticar al hacerles un chequeo venereológico (que para algunas infecciones se puede hacer a los 3-7 días de la relación sexual de riesgo).
Qué pronóstico tiene
Por lo general la infección tiene muy buen pronóstico y se cura con un tratamiento antibiótico. Sin tratamiento puede haber autocuración o que evolucione dando complicaciones, que en el hombre (< del 1%) pueden ser: dolor testicular, inflamación de la próstata o esterilidad y en las mujeres (<10%): dolor en el bajo vientre, enfermedad inflamatoria pélvica y esterilidad.
Cuál es el tratamiento
Es un tratamiento sencillo con antibiótico (habitualmente dosis única: o un comprimido o una inyección). Hay que tratar a todas las parejas sexuales de los últimos 60 días, tengan o no síntomas.
Cómo se puede prevenir
Mediante la utilización correcta del preservativo en todo tipo de relaciones sexuales, incluido el sexo oral. Los objetos sexuales si no se cubren con un preservativo también pueden facilitar la transmisión. No hay vacunas.